Aún para quienes no conocen esa bella isla del Caribe, Cuba es sinónimo del mejor de los ritmos, es la propagación de la buena música y de letras que transportan a la cotidianidad de su gente, siempre con la alegría que los caracteriza.

Un canto cubano es un himno de esperanza y porqué no, de libertad. Entonces cada entonación llega al alma y calma cualquier pena.

Por eso recopilar lo más representativo de su música es el ideal de los coleccionistas, porque no hay pieza mala y si ya no están quienes les dieron vida en los grandes salones de La Habana, pues la nueva generación se encarga de hacerlo.

Así, Albita, Rey Ruiz y Donato Poveda, son los llamados a este trabajo de recordación del arte musical cubano. Sus voces magistrales rinden culto a esas costumbres que se niegan a desaparecer y que se enmarcan siempre en sus tonadas.

Este trabajo. “Cuba: Un viaje musical”, llega a mostrar las bellas composiciones que en su momento se escucharon en las voces inmortales de la Guarachera de Cuba, Celia Cruz, también en la melodiosa interpretación de Beni Moré o el Trío Matamoros, entre otros grandes.

Luis Bofill y Son del Son

Este artista que hace parte de la Nueva Trova, por ese sonido característico de la isla que se imprime en cada una de sus interpretaciones, de amplia trayectoria que tras hacer una carrera consolidada y ganar innumerables reconocimientos, se adentra en una producción que rompe esquemas.

Compartiendo escenarios con grandes figuras, Bofill ha experimentado sonidos, a los que ha incorporado su esencia cubana, dando como resultado una propuesta de corte internacional que llega con facilidad al público.

En esta oportunidad el cubano hace un homenaje al compositor e ídolo mexicano Juan Gabriel, en un trabajo discográfico que ofrece son cubano, con bellas letras; un ritmo que embriaga, es la apuesta a un estilo propio con éxitos dignos de ser exaltados, como “Amor eterno”, “Hasta que te conocí”, “No me vuelvo a enamorar”, y “Querida”, entre otros.